Tres partidazos y uno no tanto
La champions siguió su rumbo y se jugaron los cuartos de final con tres juegazos y uno que realmente fue lo que se esperaba. Fueron jornadas con momentos de infarto, expulsiones, errores y las infaltables lesiones, pero elementos que al fin enmarcaron todo lo que significa estas alturas de la competición.
Dos joyas de partidos como se anticipaba fueron los que jugaron el Bayern contra el Manchester y el Arsenal ante el Barça. Los bávaros iniciaron con un gol recibido de camerino que en el minuto 2 les encajo Wayne Rooney, y con eso a los de Ferguson no les costó mucho ir adaptándose al césped del Allianz Arena, pero los alemanes no se dejaron y se vivió un verdadero toma y dame que terminaría a favor de los locales. El francés Frank Ribéry marcó al minuto 77 el gol que haría un justo empate, y desde ahí la maquinaría teutona no bajó los brazos consiguiendo que al minuto 92 el croata Olić no perdonara y definiera el encuentro con un trallazo.
El otro gran partido que fue una oda al fútbol lo representaron los culés y los gunners, donde las emociones estuvieron a flor de piel durante los 90 minutos. El Barcelona visitó al Arsenal y salió con una pequeñísima ventaja para la vuelta, empatando a dos goles en el Emirates Stadium. Los azulgranas arrancaron con un ritmo endemoniado y vivieron los primeros 20 minutos atacando pero sin conseguir nada, que al final les pasó factura. El Arsenal intentaba reencontrase con su juego y lo fueron recuperando, pero al culminar el primer tiempo todo quedó igualado a cero. El sueco Zlatan Ibrahimovic vacunó la malla de Almunia empezando la segunda mitad, y más tarde el mismo personaje lo hizo por segunda vez dándole un dos cero al Barça que parecía sentenciar todo. Pero el fútbol que todos querían ver del Arsenal apareció y el recién ingresado Theo Walcott descontó al minuto 69 para darle un respiro al conjunto inglés. Luego en el minuto 85 se cobró un penal sobre Fabregas que para mi fue dudoso, pero que de igual manera lo convirtió el mismo capitán y le aguaron la fiesta a los catalanes.
El duelo galo que representaban el Lyon y el Burdeos fue un juego de viejos conocidos. El Olympique sacó la ventaja de estar en casa y le propinó al Girondins tres dianas que son valiosísimas para el encuentro de vuelta. Par de goles por parte del argentino Lisandro y otro de Bastos sentenciaron los 90 minutos, aunque el Burdeos descontó por Marouane Chamakh no fue suficiente para hacerle daño a la oncena local. Hubo mucho ritmo como se esperaba y fue un gran espectáculo en verdad, pero soy de los que creen que para el juego de vuelta el Lyon no la tendrá tan fácil.
El Inter recibió en casa al CSKA de Moscú y si bien es cierto que se llevó la victoria con un gol de su artillero Milito, no lo es menos que les costó llenarles el saco para ir más seguros a Rusia. Fue un partido de muchas faltas y trabas donde los italianos tuvieron que esperar al minuto 65 para irse arriba. Sin duda lo más destacable aparte del gol, fue la gran actuación del guardameta del Cska, Igor Akinfeev, quien tuvo unas buenas intervenciones en el segundo tiempo para secar la delantera neroazurra. Fue un juego donde muchos concordaron lo que pasaría y no hubo gran sorpresa.
Lesiones preocupantes
Esta jornada de la champions mandó a la enfermería a unos cuantos jugadores que ponen en serios aprietos a sus clubes. Está el caso del inglés Wayne Rooney quien salió lastimado ante el Bayern y ya se sabe que sufre una lesión "de poca gravedad" en los ligamentos del tobillo según el Manchester, y se descarta que el internacional sufra una fractura y se especula que pudiera estar entre dos o cuatro semanas fuera de los campos.
Por parte del Arsenal fue un verdadero caos el tema de las lesiones, abandonaron tocados Andrei Arshavin y William Gallas además del capitán Fábregas que culminó el encuentro pero con serias molestias. El ruso Arshavin será baja entre dos y tres semanas y no tiene nada que ver con una recaída de su anterior lesión. El francés Gallas ya se supo que sufre un desgarro en un músculo de la pantorrilla y se perderá el resto de la temporada, pero puede que este listo para el Mundial. Sobre el catalán Cesc ronda una gran preocupación ya que puede tener una posible fractura de peroné que no solo lo dejaría fuera de sus juegos con el club, sino de la cita mundialista.
Luis Venegas
Pichangadefutbol@gmail.com
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Columna publicada el 01-04-2010
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